miércoles, 9 de marzo de 2011

Rojo carmin

Cómo consiguió ella centrarse y tirar a diana. Acertar con su dardo y dar hondo. Clavó en el centro, allà donde dicen que hay premio. No le gustaban a él los juegos bélicos, quizá a ella tampoco pero puso todas sus sutilezas en juego y pese a su ceguera lo clavó en el centro mismo, en el rojo carmin del circulo.  Ganar y fin del juego. Cuando se llega a  diana no hay más que ganar. Juntos marchan en busca de otro acertar. El tiempo que uno gana es tiempo que rie a los dioses, de eso se trataba.

Yo mientras tanto, pintaba mis cuadros con arcoiris y jamás jugué a dardos. No es lo mio.
Hoy y ya hasta aquí, monto mi nuevo juego más acorde con mi Ser y me pinto los labios de rojo carmin.

fotografía Mía

2 comentarios:

Isa Hernández Gil (Isaura del Valle) dijo...

A veces, en ocasiones,aún "ganando" se pierde... Y perdiendo, se "gana"
Hay tipos dejuego en los que el simple hecho de jugar a ellos, siempre se pierde.

Todo depende de la importancia que nosotros le demos al premio o pérdida conseguidos. Y por último, ya totalmente insignificante, en "cómo lo vean los demas"

Abrazos.

María dijo...

Isaura me gusta tu interpretación del texto. Y sí todo depende del color con que se mire, yo aquí lo miré de rojo carmin...
La foto está tomada en mi paseo por tu tierra, me encantó ese color rojo.
Un abrazo y gracias por tu paseo por aquí